lunes, 5 de noviembre de 2012

El horario de clases II

Se está barajando la idea de cambiar el calendario laboral, trasladando los puentes y festivos a lunes y viernes, como se hace en otros países para no perder tantos días útiles. Evidentemente afectaría al calendario escolar, absolutamente irregular (con todos los puentes concentrados en el primer trimestre y evaluaciones de duración desigual) y que no piensa en el rendimiento pedagógico o en las necesidades de descanso de los niños. Ya apunté aquí alternativas que tocan el horario de clases habitual, pero si se aprueban estas medidas habrá que reformar sin ninguna duda el horario semanal, ya que de lo contrario determinadas materias perderán muchas horas y eso aumentará la guerra entre departamentos absurda que se agravará con la nefasta LOMCE.

¿Cómo se puede elaborar un horario que concilie las necesidades de todos? Jornadas del profesorado (y en Catalunya con las jornadas decimales es una obra de ingeniería), bajas y reducciones, peticiones personals y privilegios adquiridos por un lado. Necesidad de equilibrar las materias por otro (no es justo poner siempre a primeras horas unas y dejar para los momentos más complicados otras asignaturas, o lo que comentaba de los festivos que se pierden). Importancia de alternar el tipo de clases que reciben los alumnos para que no se saturen (algo que no se contempla). Peticiones para que en secundaria los profesores pasen más tiempo con cada grupo para conocer mejor a cada estudiante (de ahí las peticiones de ámbitos, juntar o reducir materias). Posibilidades de ubicar a profesores en cursos diferentes según especialidades. Todo ello juega en contra de tener horarios de clases racionales. Quizá es el momento de revisar esas propuestas alternativas y mirar qué se puede incorporar para reducir estos problemas. 

¿Por qué el horario ha de ser igual todo el curso? ¿Por qué ha de ser la asignatura la que marque y no otros criterios? ¿Por qué todas las horas tienen que ser de 50 minutos y no depende de la tarea encomendada? ¿Por qué no se pueden juntar de manera habitual franjas para tener dos docentes por aula? ¿Por qué no se pueden incrementar optativas y desdobles - difícil con los recortes- y así asegurar más flexibilidad? ¿Por qué solamente se debate sobre horarios en septiembre cuando los jefes de estudios van locos cuadrando y luego jamás se tocan, incluso si no funcionan?

6 comentarios:

Enrique dijo...

Cada día, el tiempo se reparte, como la tarta de un problema de matemáticas, en porciones iguales, una para cada asignatura. No importa la edad, ni el lugar, ni el momento, ni la dedicación que requiere aquello que se va a hacer o se está haciendo. Lo que prima es que la máquina funcione, que puedan rentabilizarse los espacios y coordinarse los tiempos, que todo empiece y termine simultáneamente.

Los tiempos, los espacios, las enseñanzas y las personas están tan estipulados, tan sólidamente ligados entre ellos, que cualquier alteración de lo establecido se percibe como una interferencia, como un palo metido entre las ruedas. No deja de sorprender que se mantengan en la escuela muchas de las prácticas que ya se han abandonado en las empresas.

Como toda tarea colectiva, una escuela necesita coordinarse, armonizar los encuentros y tareas de aquellos que la componen. De eso no hay duda. Pero unas organizaciones son más rígidas que otras, unas limitan más y otras limitan menos.

De entre todas las organizaciones posibles, la distribución de los alumnos en grupos estables e independientes y el reparto del tiempo en sesiones de una hora es la más extendida y, aparentemente, la que mejor funciona. También es la única que conocemos, por lo que nos resulta difícil concebir o desenvolvernos fuera de ella. Sin embargo hay otras.

Enrique dijo...

Hay muchas otras fórmulas que podrían conseguir mejores resultados, todas tienen en común lo mismo: introducir variedad, personalizar la atención y fomentar la autonomía.

http://www.otraspoliticas.com/educacion/sobre-tiempos-y-espacios

Juliiiii dijo...

Totalmente de acuerdo. Debería haber más flexibilidad horaria en esos mastodónticos horarios de nuestros pobres alumnos, que tienen que chuparse casi todos los días seis horitas claveteados en sus asientos. Habría que revisar modelos de otros países, donde se juega no solo con los horarios, sino también con los espacios.

Pero oye, estas ideas que se te ocurren, o que se le podrían ocurrir a otros docentes, ni caso, que para eso saben más nuestros políticos, como bien van a demostrar con la LOMCEcita de las narices...

eduideas dijo...

Enrique, muchas de las propuestas que dices se recogen de algún modo en los proyectos que enlacé en mi anterior post: la libertad por parte de profesores y alumnos es lo que ha de hacer variar la estructura a todos los niveles, también de horario.

Juliii, la LOMCE... todo lo que venga de ella va en la línea contraria del sentido común. Solo sabemos lo que cuesta aguantar esas seis horas los que damos clase en según qué centros

amelche dijo...

Creo que tienes razón, aunque lo de los desdobles lo tenemos difícil, en unos tiempos en que lo que quieren es exprimirnos lo más posible para no pagar a más profesores.

En cuanto a lo de los puentes, yo he trabajado dos cursos en Irlanda del Norte y es verdad que no hay tantos puentes pero... Vacaciones de Semana Santa, igual que aquí (en mi región empiezan el jueves santo y acaban el lunes de San Vicente, o sea, el lunes de dos semanas después del lunes santo, unos diez días más o menos), navidades casi igual que aquí (vuelven el 2 o el 3 de enero, según como caiga, porque no tienen Reyes), Halloween una semana entera sin clase (ahí están todos nuestros puentes del primer trimestre), y luego hay otros momentos del año en que, dependiendo de cada escuela (que elige los horarios, los días festivos, etc.), hay otra semana entera de vacaciones en febrero o finales de enero, hay San Patrick (el 17 de marzo) y, si cae martes, el lunes también es festivo, es decir sí hay puentes. Y después en mayo hay dos lunes sin clase. Con lo cual, que no nos vendan la moto, porque en otros países europeos tienen las mismas vacaciones escolares (y, si me apuras, incluso más) que aquí. Y con menos horas de clase, porque el instituto empieza a las 9 (nosotros a las 8) y acaba a las 3'20 y ya les ha dado tiempo a comer y todo allí.

eduideas dijo...

Sí, los puentes existen en más sitios pero eso no quita que haya asignaturas que los sufran más, hay que pensar el calendario de un modo global