Ayer hubo huelga en Catalunya, pero esta vez no me sumé, y no porque no comparta muchos de sus objetivos: creo que la política educativa es nefasta y la decisión de eliminar el bachillerato de algunos centros me parece de vergüenza, porque sumado al posible pacto creará centros de primera y de segunda, curiosamente ubicados en determinadas zonas.
No me sumé porque creo que hay que ir variando las medidas de presión, porque estamos en evaluaciones (algo que no piensan los sindicatos que no dan clase al elegir fechas) y sobre todo porque me molesta que entre las reivindicaciones legítimas y que claman al cielo se mezclan otras, como no empezar el curso antes que nos hacen parecer ante la opinión pública como un colectivo que solamente quiere escaquearse. ¿Por qué mezclan la autonomía de centros, la supresión de bachilleratos con el nuevo calendario? Incluso oí consignas a favor de los interinos, como si tuviese algo que ver. Estos actos nos hacen perder la razón, por eso llevamos cuatro huelgas y los decretos siguen avanzando imparables, mientras los periodistas se forran comentando "Otra vez".
2 comentarios:
Yo tampoco fui a la huelga, porque a todas las razones que aduces, se suma el cierre de muchos centros de Gerona (entre los que se halla el mío) por la nevada.
Razón de más, no hay que perder tantas clases, tiene que haber otras medidas de presión
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