martes, 28 de septiembre de 2010

Dar clase fuera del centro

La amenaza de suprimir las colonias se ha convertido en el boomerang de rabia entre maestros y el Departament, con cruce de cartas públicas y peticiones a los padres para que se sumen a uno y otro bando. Todos cantan las bondades de salir fuera y convivir, aunque luego sabemos que cuesta montar salidas, obtener profesores que las guíen y sobre todo incorporarlas al currículum.

Debería dedicarse una mañana a dar clase fuera del centro, aprovechando los recursos del entorno o las excursiones. Ir a museos, aplicar lo aprendido en la calle, hablar con la gente o expertos, estar en el campo, crear dinámicas sin pupitres. Ellos se lo pasarían mejor, perderían esa visión del colegio como cárcel que tanto se mantiene, las relaciones con el profesor cambiarían al ser un contexto menos formal y sin duda se podrían aprender cosas que el currículum rígido no permite. Además, serviria para fomentar un ocio saludable y para conocer lo que ofrece el entorno.

martes, 21 de septiembre de 2010

Universidades y citas

Los ránkings internacionales dejan muy mal parada la universidad española. Muchos de ellos usan como criterio el número de citas de las investigaciones, ahí es donde creo que habría que incidir más a partir de 3 ejes claros

1) es básico el fomento de idiomas, para que nuestros doctorandos puedan presentar sus resultados en congresos internacionales, algo que debe fomentarse desde secundaria: ya propuse en su día ofrecer como optativas diferenciales de centro las lenguas extranjeras

2) evidentemente es necesario más presupuesto para investigación, de modo que los mejores no huyan de España y publiquen desde otras universidades, la educación superior y la básica son los dos ejes del sistema

3) creo que deberían sumarse esfuerzos y ofrecer muchos más postgrados y doctorados interuniversitarios, igual que en la revistas, pues las energías en promocionar "mi" revistilla podrían sumarse para crear un producto de calidad, de referencia en cada área, citado internacionalmente

Claro que para llegar a la excelencia investigadora hay que mejorar el rendimiento en los grados, un tema pendiente

martes, 14 de septiembre de 2010

Configurar el horario de los profesores

Las demás comunidades comienzan esta semana las clases y, como siempre, uno de los temas básicos es el horario de clases que tiene cada profesor. Se intenta contentar a los docentes, que suelen escoger primero grupos y horarios según antigüedad (es el proceso mayoritario en los centros, aunque no el único). Ya hablé de la necesidad de contar con franjas flexibles que permitan la coordinación o el trabajo por proyectos pero también hay que tener en cuenta cómo se reparten las horas "normales".

Rara vez suele ser por criterios pedagógicos:
- no tener siempre las mismas materias a las mismas horas (acabar cada día con matemáticas puede ser mortal)
- alternar tipos de asignaturas para no cansar al alumnado y favorecer los diferentes tipos de aprendizaje (por ejemplo no colocar las dos lenguas juntas, o poner EF entre dos asignaturas más teóricas)
-incluir los refuerzos extralectivos en el planning general del profesorado, especialmente el de apoyo
-poner juntas materias que hayan expresado la voluntad de trabajar conjuntamente algún tema

Es decir, no se coloca en el centro ni al alumno ni la actividad docente, se intentan cuadrar preferencias personales (que deben contemplarse, pero después de lo anterior) y evitar muchas tardes a los veteranos. Entiendo que es muy difícil cuadrarlo todo, pero quizá el enfoque no sea el más adecuado. ¿Qué criterios creéis que deberían tenerse en cuenta para configurar el horario de un centro? ¿Se hace en el vuestro?

lunes, 6 de septiembre de 2010

Otro inicio de curso

En XarxaTic han publicado un estupendo resumen de la situación de caos que se está produciendo con el libro digital y los ordenadores, y nuevamente se pone de manifiesto que la línea de digitalización no es ésa. No me gustan los libros, malas copias de la versión en papel con el "atractivo" de vídeos y animaciones que pueden ser muy gráficos y motivadores para explicar pero que son un desastre para estudiar pues hay que verlos enteros cada vez, sin respetar el ritmo, sin leer en diagonal, sin poder subrayar lo importante. No me gusta que haya sido todo por decreto sin preparación docente y olvidando que el futuro es Internet sin libros de texto. Y no me gusta el tufo económico que tiene todo el plan, a costa de sacrificios de plantillas y proyectos diversos.

Mientras el máster, ahora ya en su versión definitiva y completa que arranca en breve, parece ajeno a todo el debate, y reproduce los modelos de antes. Las oposiciones siguen pidiendo una programación que después queda anulada por el libro de texto obligado (muchos profesionales lo usan como una guía y luego introducen sus actividades pero no es la utilización mayoritaria) y los planes de autonomía que deberían parar ese omnipresencia comienzan en un mar de dudas, pendientes de más concreciones y con un papel de los directores dudoso.

A pesar de todo, empezamos mañana, antes que nunca. Y con ganas, ganas de ver a los alumnos, de dar clase, de aprender y seguir en la que es una de las mejores profesiones del mundo, aunque a veces desde arriba se empeñen en intentar cambiar eso.